Cuando se trabaja con mármol se produce una gran cantidad de polvo que es necesario aspirar para no estropear las piezas sobre las cuales se está trabajando, además de para garantizar la seguridad de los operarios que se encargan de ellas. 

A la hora de hacerlo existen dos posibilidades: aspirar con agua o en seco. ¿Y cuál de las dos opciones es mejor? Lo cierto es que aspirar el mármol en seco tiene muchas ventajas. A continuación te las explicamos así que ¡continúa leyendo!

Ventajas de aspirar el mármol en seco en lugar de utilizar el agua

Aspirar el mármol en seco en lugar de hacerlo con una cortina de agua tiene muchas ventajas para las empresas. Veámoslas:  

  • En primer lugar, el sistema cuyo uso implica menos riesgos: para aspirar el polvo del mármol en seco todo lo que hace falta es instalar una cabina de aspiración que no debe afrontar los problemas que puede causar el empleo del agua. Estos problemas son, principalmente: la necesidad de cambiar de forma periódica los filtros, las obstrucciones de dichos filtros, los inconvenientes generados por una limpieza poco eficiente de los depósitos, por el agua mal reciclada…En cambio, la cabina de aspiración en seco tiene un mayor poder de succión que el agua, con lo cual su funcionamiento es más sencillo y no depende de mantener una densa cortina de agua. 
  • En segundo lugar, es más fácil de mantener: las cabinas de aspiración del mármol también cuentan con sistema de autolimpieza programable. Gracias a él se activa un breve ciclo inverso, las mangas textiles vibran y el polvo cae en los cajones inferiores, que luego simplemente hay que vaciar. En cambio, como ya hemos visto, los sistemas que funcionan con agua requieren de una limpieza periódica de los filtros y de recambios constantes. 
  • En tercer lugar, es más económico: precisamente porque un sistema de aspiración del polvo en seco es más fácil de mantener, también es más barato en el medio y largo plazo. 

Por otra parte, las cabinas de aspiración en seco se fabrican en cualquier medida, con lo cual las empresas pueden hacerse con una cabina que se acople perfectamente al número de operarios que vayan a trabajar en su interior.